Nada ni nadie me controlará jamás

¡Hola! Hace tan sólo dos años no hacía nada de ejercicio y estaba casada pasando violencia en mi matrimonio, aunque nadie lo sabía y todos creían que yo era muy felíz, en mi primer aniversario (Feb 2013) ví una foto que cambió todo para mí.

Siempre me había cuidado físicamente aunque no con deporte, de repente, era una mujer irreconocible con muchos kilos de más, (pues él quería que yo fuera obesa como él y me obligaba a comer), pero sobre todo, mi esencia no era la misma, había pasado a ser alguien sin alegría ni entusiasmo sin darme cuenta.

Él me había cambiado por dentro y por fuera y esa foto me hizo darme cuenta de que todo andaba mal. Decidí en ese momento hacer algo o más bien mucho por mí, empecé  a quererme y a hacer ejercicio y dieta. Me subí a una caminadora y al principio, tan sólo 5 minutos me mataban. En fin, el caminar empezó a hacerme sentir mejor porque esos minutos eran míos, era mi momento y de nadie más.

En unos cuantos meses ya lograba hacer cerca de una hora en la caminadora pero sólo eran menos de 3 Km. Y fue entonces que vi un anuncio en el hospital que había llevado al que era mi esposo, que habría una carrera a beneficio de Heart Association en San Angelo, Tx. Me emocioné tanto que decidí inscribirme, ni siquiera sabía si la iba a poder terminar pues yo hacía menos de 3 Km. Mi hija, entonces de 10 años, dijo que la haría conmigo y fuimos a intentarlo, las dos nos apoyamos todo el tiempo, y llegamos en cuarto lugar, aunque no había organización de tiempo ni nada por el estilo, solo diploma de participación.

Esa emoción y buena vibra que se siente, que toda esa gente esta ahí reunida temprano para una carrera, no para coquetear, no para bailar sino para hacer ejercicio, sin importar en qué lugar llegues, pues el hecho de cruzar la meta te hace ganadora, eso que yo sentí, la emoción de que empezará y de terminar, fue lo que me atrapó en las carreras, una emoción que yo no había experimentado jamás.

Aquí empezó realmente mi historia, fueron dos cosas que me marcarón ese día: mi pasión por correr y el fin de mi matrimonio, él no soportó que yo pudiera hacerlo y tan sólo 4 días después firmamos el divorcio. Para entonces, ya había bajado 10 kilos. Todo se derrumbó, mi vida cambió, regresé a México con mi hija, sin nada, a empezar de cero y con el corazón destruído.

En México ya no tenía una caminadora y no tenía dinero para comprar una, así que decidí salir a caminar y esta vez dije, si ya hiciste los 5K, ahora no puedes hacer menos que eso. Después de 2 meses, me dije ¿qué tal si intento trotar?, aunque por dentro decía “no, no hay manera de que lo logres”, pero mi sorpresa fue mayúscula cuando pude. A partir de ahí, fue que hice otras 4 carreras más con mi hija, 2 más de 5K, una de 3K y otra de 2K. Fue increíble la experiencia de compartir estos momentos con ella, no tiene igual, pero decidí que había llegado el momento de ir por más y descubrí de lo que soy capaz. Cada vez que salgo a entrenar y mejoro ya sea por unos segundos o aumento distancia, cuando antes no hacía nada, me admiro.

#MiHeroínaSoyYo, sé que soy lenta pero fuerte a la vez, el running hizo que saliera más pronto de la etapa de depresión que estaba viviendo y por alguna razón no me dejó derrumbarme. Correr, bueno, más bien trotar, ha sido una experiencia totalmente diferente, ha cambiado todo lo que había vivido, me demuestra que soy más fuerte de lo que yo pensaba y que mi vida y mi fortaleza no dependen de nadie más que de mí misma. Quiero hacer que mi hija se siga sintiendo muy orgullosa de mí, quiero dejarle el ejemplo, de que la mejor manera de salir adelante con obstáculos, es haciendo ejercicio y no tirándose en una cama a llorar o dormir, o querer sobrellevarlos con adicciones ni nada por el estilo.

Estoy entrenando ahora para el Medio Maratón Internacional de Guadalajara, sé que no voy por primeros lugares ni nada por el estilo, me da nervios pero sé que lo lograré y es por dárselo a mi hija de regalo de cumpleaños. Para mi, cruzar la meta es ganar después de todo, será la misma distancia que hicierón los primeros lugares ¿o no?. Me admiro a mí misma porque no sabía de lo que era capaz y menos que empezaría unos meses antes de cumplir los 43 años. Nunca fui deportista, ni me imaginaba serlo, nunca estuvo en mis planes y me hace muy feliz serlo ahora, lamento no haberlo empezado muchos años atrás.

Voy por mucho, mucho más. Quiero ser una de esas señoras que llegan a ser ganadoras de los primeros lugares, no sé cuánto me llevé, pero sé que lo lograré.

#MiHeroínaSoyYo porque soy más fuerte de lo que creí.

#MiHeroínaSoyYo porque  aprendí que no hay que permitir que nadie te violente de ningún modo.

#MiHeroínaSoyYo porque nada, ni nadie me controlará nunca más.

María Alicia Preciado Cueto