Sé tú misma
Hace una semana tuve la oportunidad de escaparme a una convención de fitness en California; la más grande en Estados Unidos: IDEA Fitness Convention.
Lo había planeado con tanta anticipación que estaba tan emocionada como si me hubieran regalado un viaje a Disney.
Es la 5a vez que voy y lo disfruto muchísimo pues es mi santuario, mi paraíso, mi “happy place”. Cuatro días intensivos de clases, conferencias y una Expo que te mueres, de esas en donde encuentras todo lo que te puedas imaginar (gadgets, ropa, accesorios, aparatos, vitaminas, suplementos, barritas, libros, todas las últimas tendencias y más!).
BE The Inspiration. Así se leía por todos lados en la convención. BE strong. BE fit, BE yourself.
Me encantó y me recordó lo realmente importante; ser yo misma y ser coherente y fiel a mis creencias y a mis valores.
Me recordó porqué me fascina dedicarme al fitness; estar cerca de tanta gente de todo el mundo con tanta pasión por un mundo más sano, por menos efermedades y más endorfinas, me inspiró muchísimo y fortaleció mi compromiso por contagiar el virus, por inspirar a unos cuantos y hacer de este mundo un lugar más feliz con más personas activas y menos sedentarios.
¡4 días para mí! Sin esposo, hijos, pendientes, horarios…ufff!
Sin embargo, este año fue diferente pues me encontraba en medio de mi training mode.
¡Vaya diema! ¿Cómo le haría para tomar todas las clases que con tanto tiempo había escogido y planeado y además encontrar el tiempo y la energía para correr?
Pues por eso soy corredora; porque en este momento de mi vida mi prioridad es mi maratón, lo que ocupa mi mente y mi cuerpo y la meta que me mantiene motivada y nerviosa contando los días en el calendario está clara: mi 27 de octubre en Washington al lado de mi running buddy.
Así que no había mucho que pensar; me organicé para hacerme tiempos extra en el gimnasio del hotel y me puse a correr.
Hacerlo por 1a vez en la caminadora tras 5 semanas de correr en la calle, fue un buen cambio de escenario y confieso que para correr mi carrera larga de 21K tuve que bajar varios capítulos de mi serie de tv favorita para verlos mientras corría.
Antes me hubiera parecido una locura correr medio maratón en una caminadora pero eso es lo que correr me ha regalado; una determinación a prueba de balas.
Una claridad de mente absoluta: sé lo que quiero y voy hacia ese camino con absoluta certeza de que cruzaré la meta de mis próximos 42K.
No sé cuánto tiempo haga (¡aunque obvio tengo el número secretamente guardado en mi mente!) y la verdad es que no importa tanto; lo que si sé es que cruzaré la meta con una gran sonrisa.
Así somos las mujeres corredoras.