El ejercicio intenso alarga la vida y mejora la función cerebral
Cuando te toque hacer ejercicio intenso, no pongas excusas, te conviene. Hay una estrecha relación con vivir más años y mejorar la función cerebral. Ahora te decimos las razones.
¿Eres de las que quieres vivir más años? Pues solo tienes que esforzarte un poco más a la hora de entrenar. Así lo determina un nuevo estudio publicado en JAMA Internal Medicine, el cual que demuestra la relación que existe entre el ejercicio de alta intensidad con la longevidad.
Los investigadores compararon el promedio de mortalidad con la cantidad de actividad física. Los individuos que reportaron entrenar de forma regular en actividades que iban de moderadas a intensas, tendían a vivir más años. Los que confirmaron que el 30% de su actividad física era intensa, tenían un 9% menos de riesgo de mortalidad que los que no hicieron ejercicio de forma vigorosa, pero este porcentaje se incrementó a un 13% en los adultos que demostraron que más del 30% de su actividad física sí era intensa.
Pues bien, este dato aplica para todos los individuos, independientemente del género, el promedio de masa muscular y de condiciones especiales.
«Nuestros hallazgos sugieren que las actividades vigorosas como correr deberían promocionarse en las guías de actividad física de salud pública para maximizar la popularidad de los beneficios de hacer ejercicio», concluyeron los autores del estudio.
Por otro lado, un estudio científico realizado por el Hospital Universitario de Bonn, en Alemania, mostró por primera vez cómo el grado de intensidad con el que se realiza ejercicio influye en la función cerebral de las personas.
El estudio que fue publicado en la revista Brain Plasticity a principios de 2020, encontró que el ejercicio de baja intensidad desencadena redes cerebrales involucradas en el control de la cognición y la atención, mientras que el ejercicio intenso activa las redes que interfieren en el procesamiento afectivo emocional.
Para llegar a esta conclusión, los investigadores examinaron a través de resonancia magnética la función cerebral de 25 atletas masculinos, quienes se sometieron a pruebas de cinta de correr incremental. En días separados realizaron ejercicios de baja y alta intensidad durante 30 minutos.
De acuerdo con los resultados, los participantes tuvieron un aumento significativo en el estado de ánimo después de practicar ejercicio de alta intensidad. Además, este tipo de actividad mostró una disminución de la conectividad funcional en las redes asociadas con la función motora.
Mientras que con el ejercicio de baja intensidad obtuvieron una mayor conectividad funcional en redes asociadas con el procesamiento cognitivo y la atención.
Ya lo sabes, si no tienes un impedimento médico comprobado para no aumentar la intensidad a tu entrenamiento, es hora de que te atrevas a ir un paso más, no solo bajarás de peso y serás más rápida, también vivirás más años y funcionará mejor tu cerebro.