Siempre me consideré una apasionada del deporte porque desde pequeña estuve metida en algún tipo de actividad física: primero gimnasia olímpica y después, por muchos años, básquetbol; tuve muchas lesiones y aún así, seguía jugando. Dedos rotos y yo seguía jugando; un hombro dislocado, me lo acomodaba en ese momento, y ¡a seguir jugando!. Al…