5 señales de que ya no puedes controlar tus ganas de correr
Correr más y más parece que está de moda. Ahora muchas corredoras amateur se están profesionalizando para correr más rápido, más volumen y a más intensidad. Pero hay otros factores que se deben tomar en cuenta en una corredora que no es elite.
Las corredoras amateur tenemos otras responsabilidades además de entrenar y quizá estemos sometidas a un estrés mucho mayor que el de una atleta elite. A veces, sumergidas en el ambiente competitivo de correr creemos que no estamos entrenando lo suficiente cuando en realidad, es que estamos sobre entrenadas y nuestro cuerpo pide un descanso.
Aquí te dejamos 5 señales de que tu gusto por correr se transformó en obsesión y ya no puedes parar.
- Ya te estancaste. A pesar de que cada vez corres más kilómetros y a ritmos más rápidos, sientes que ahora te cuestan más trabajo los entrenamientos y terminas más agotada que de costumbre, quizá sea una señal de que estás llegando a tu límite por el momento, esto no quiero decir que las cosas no vayan a mejorar.
- Lesiones más frecuentes y recuperación más lenta. Es típico que cada vez te duele más el cuerpo, ya no solo una zona en específico, sino que en general sientes más dolor y además, te cuesta más trabajo recuperarte entre sesión y sesión.
- El estado de ánimo se vuelve más irritable. Cuando ya solo veas lo negativo en todo lo que te sucede, pon atención al exceso de entrenamiento, además hay falta de concentración y enfoque y la motivación ya no es la misma.
- Cambios en la frecuencia cardiaca. Puede pasar que al estar entrenando en exceso tu frecuencia cardiaca aumente con mayor facilidad y que te sea más difícil volver a la calma. Correr no debe causarte esto.
- Pérdida de peso o ganancia de peso repentina. La pérdida puede estar relacionada con el incremento de la adrenalina y la noradrenalina que disminuyen el apetito, con lo cual vas a sentir más cansancio por la falta de energía. En cuanto al aumento de peso, puede estar relacionada con la necesidad de consumir más azúcar y mentalmente puede significar tu deseo de protegerte de tanto estrés.
Si tienes dos o más señales de éstas en tu vida de corredora, deténte y checa si es momento de bajar un poco el ritmo para alcanzar ese desempeño que tanto deseas.