Hábitos para lograr tus objetivos
La temporada alta de carreras está aquí y seguro, quieres correr mejor, mejorar tus marcas o bien, probar una nueva distancia. Te dejamos estos sencillos hábitos para que tengas éxito en cualquiera que sea el reto que te hayas propuesto.
1. Varía tu entrenamiento. Investigaciones demuestran que se pueden tener mejores resultados si combinas sesiones de fuerza, elasticidad o cross-training con la carrera. Los días que no corras opta por ejercicios de menor impacto como la bici o la natación. Además, mentalmente no te agotarás tan rápido.
2. Come lo que necesitas. Los requerimientos de una corredora son muy diferentes a los de una persona sedentaria. El 60% de tu dieta deben ser los carbohidratos, un 30% proteínas y el resto grasa saludable. Evita los ayunos antes de entrenar y comer demasiada grasa y azúcares con el pretexto de que corres mucho.
3. Planea tu rutina y cúmplela. Trata de no fallar a tus entrenamientos y si de plano, tus ocupaciones no te lo permiten, ten un plan B por si un día no puedes. Por lo menos, trata de que 4 días a la semana sí cumplas con el objetivo marcado.
4. Registra tu progreso. Tener una app que te vaya monitoreando es una gran herramienta para evaluar tu rendimiento. Te recomendamos Garmin Connect, Nike + o Endomondo.
5. Controla tus ansias por una carrera. Sentir emoción y hasta cierto punto, algunos nervios por la prueba para la que estás entrenando, es parte de la magia del running. Pero si ves que eso te lleva a un estrés alto y que empiece a afectar tu vida en otros aspectos, toma cartas en el asunto. Tu mente debe estar preparada para que la adrenalina generada no te consuma el día de la carrera o te provoque un sobreentrenamiento. La confianza te la va a dar el haber cumplido con el programa asignado.
6. Escucha tu cuerpo. Correr nunca debe dolerte demasiado, si notas que tienes demasiado sueño, padeces de insomnio, te muestras alterada emocionalmente, tus piernas ya no responden igual o bien, te aburriste de correr, es hora de frenar. La clave para correr bien cuando estás agotada es no correr. Aprende a identificar cuándo puedes forzar a tu cuerpo y cuando no.
7. No cambies nada el día de la carrera. Deja los experimentos para cuando entrenas, no estrenes ropa ni calzado el día de tu evento. Es más ni siquiera comas algo que no hayas consumido antes, debes seguir la misma rutina que en tus entrenamientos.
8. Infórmate y lee antes de la carrera. Ver la ruta, saber dónde estarán ubicados el guardarropa, los baños y tu corral de salida, entre otros, te dará más confianza y te sentirás más tranquila.
9. Reflexiona y vuelve a la calma. Una vez que hayas terminado la carrera, es normal que en algún momento sientas que no lo diste todo, aunque te recomendamos ser lo más objetiva posible y analizar tu resultado. Cuando termines la carrera, sigue caminando y espera a que bajen las pulsaciones y después, reflexionas sobre tu desempeño.
10. Descansa. Una vez que hayas cumplido con tu objetivo, es hora de que te tomes unos días de descanso. Entrenar intenso al siguiente día de una prueba, solo te hará más vulnerable a las lesiones. Necesitas recuperarte tanto física como mentalmente.