Nadar te ayuda a correr rápido, ¡aquí 4 beneficios!
Nadar es un complemento perfecto para una corredora. Es un ejercicio de cardio de bajo impacto que permite que los músculos se relajen.
Por lo regular, nos vamos a nadar cuando estamos lesionadas, cuando nos vamos a divertir a la playa. Sin embargo, los beneficios son muchos no solo para cuidar nuestras articulaciones, sino para mejorar el rendimiento y despejar la mente. Aquí dejamos algunos beneficios de nadar.
Mejora la capacidad pulmonar.
Si un día a la semana incluyes una sesión ligera de natación (máximo 40 min) te ayudará a mejorar tu capacidad pulmonar. Es decir, al nadar ingresa más aire a los pulmones sin utilizar tanta energía y esto te permitirá correr a más velocidad porque retrasarás la fatiga.
Recuperación activa.
Por otro lado, se trata de una sesión de recuperación activa que no pone en riesgo las articulaciones. En una sesión tonificas y desarrollas todos los músculos del cuerpo, quemas grasa más rápido, baja la presión arterial y te relajas.
Te alivias más rápido de las lesiones
Si estás lesionada o has decidido hacer una pausa en tu entrenamiento de carrera y quieres solo nadar, puedes mantener tu condición física por 6 semanas. En el agua se contrarresta el efecto de la gravedad, por lo mismo, reduces la presión en las articulaciones. Incluye una sesión de aquarunning para prevenir lesiones, puedes usar cinturones y polainas flotantes de espuma para hacer fuerza.
Mejora le técnica de carrera
Si haces aquarunning vas a fortalecer los músculos pero también, trabajas fuerza por la resistencia del agua. Si reservas unos 15-20 minutos a correr en la piscina, vas a mejorar tu técnica de carrera al forzarte a mejorar tu postura y el movimiento para avanzar dentro del agua.
¿Necesitas más motivos para combinar tu carrera con la natación? ¡Solo necesitas un día por semana!