Empezar a correr después de los 50 años: Susana Ortega
Se llama Susana Ortega y es corredora. Hace 6 años fue diagnosticada con diabetes, se separó de su pareja y entró en una terrible depresión. Ella misma dice que sí no fuera por sus hijos no estaría aquí y no nos podría contar su increíble historia.
Susana Ortega es un ejemplo a seguir, comenzó su carrera como corredora después de los 50 años de edad. Sus hijos fueron los que la levantaron de la depresión y la animaron a correr, ellos son corredores desde hace muchos años, y también fueron sus entrenadores.
Susana no comenzó a correr de un día para el otro, nos contó que corría un poco y luego caminaba hasta que un día se comenzó a poner metas. Por ejemplo, veía un árbol y se proponía llegar corriendo hasta él, y así sucesivamente, hasta que se corrió su primer 5K, 10K, 21K y maratón.
Correr le enseño a ser fuerte y a darse cuenta de que tiene la fortuna de estar viva, de esta forma su enfermedad pasó a segundo plano. Ella sabe perfectamente que cuando corres la emoción está al 100% y sus piernas, el amor de su familia y correr le enseñaron que no solo es “la mamá de sus hijos”, “la ex-pareja de alguien” sino que es Susana Ortega y le encanta ser quien es.
Lleva 4 años corriendo y gracias a eso, no se ha dejado morir como ella afirma. Su doctora la mantiene a base de puras medicinas naturales. Nos contó que antes de estos 4 años sus nietos jamás la habían visto sonreír. En las noches antes de dormir agradece por todo, por la segunda oportunidad y por todo lo que le permiten hacer sus piernas. Correr es su catarsis, su sanación, motor y lo que la motiva a seguir adelante.
Cuando le preguntamos a Susana qué le diría a las mujeres mayores de 50 años que quieren comenzar a correr y no se atreven les mandó un mensaje: “No se rindan y atrévanse a cruzar esa línea para salir de su zona de confort, nunca estás sola y eres capaz de lograr cosas que no creías, vas a descubrir de todo aquello de lo que eres capaz, cruza esa línea, ponte los tenis y sal a correr. Libérate de tus miedos y atrévete”.
Gracias Susana Ortega por compartir tu experiencia con nosotras.