5 corredoras que empezaron a correr después de los 50 años
Estas corredoras nos demuestran que nunca es tarde para emprender un nuevo sueño. Aquí te contamos las historias de 5 mujeres que empezaron a correr después de los 50 años.
Luz María Barocio Martínez
(Historia compartida por Isa Martínez)
Ella es mi hermana Luz María, tiene 65 años de edad. Comenzó a correr gracias a una carrera de 5k organizada por el sector salud en nuestra ciudad de La Barca, Jalisco, y a partir de ese día, ha descubierto su gran gusto por correr. Ha participado en eventos deportivos organizados por el DIF, ganando primero y segundo lugar en 100m planos y relevos. Su mayor reto fue terminar su primera carrera de 5k, pero desde ese día, a la fecha, ha participado en 12 carreras más. Su próximo reto es participar en más competencias en otras ciudades y estados, y seguir corriendo, porque correr la hace muy feliz. Luz Ma nos invita a correr sin importar la edad, porque ella es un ejemplo de que sí se puede.
María de Lourdes Rosas Rodríguez
Tengo 75 años, comencé a correr gracias a mi hija, ella fue quien me invitó y motivó para acompañarla a correr. He participado en más de 50 carreras de 5, 10 y 13k. El reto más grande al que me enfrento es el hecho de no poder ver bien y tener una rodilla dañada, pero eso no me impide esforzarme y disfrutar al máximo las carreras. Mi mayor motivación es estar sana para mi hija y seguir corriendo hasta que Dios me lo permita.
María Guadalupe Camarena Román
Mi nombre es Lupita Camarena, soy originaria de Jalisco y tengo 60 años de edad. Comencé a correr a los 50, motivada por acompañar a mi esposo a los viajes de carreras, ya que la condición para llevarme era que yo corriera mínimo los 5k. Así fue como me inicié corriendo, aún sin mucha constancia. En 2012, me uní a un grupo de corredores y tomé la decisión de entrenar para correr medios maratones y participar en carreras de montaña. Hace dos años descubrí un libro que tenía mi esposo entre sus cosas: “Cómo dominar el maratón después de los 40 años” de Don Fink, y a la edad de 58, comencé mi entrenamiento para convertirme en maratonista. Lamentablemente mi sueño se vino abajo cuando, a dos semanas del maratón, me enfermé gravemente de influenza y no pude correr. Meses después retomé mi objetivo y tras un proceso difícil, debido a la enfermedad de mi madre, busqué la forma de entrenar en mis escasos tiempos libres y con muchos altibajos emocionales. Tres semanas antes de mi maratón, mi mamá murió. Llegué al maratón de Torreón luchando con el dolor de mi pérdida y con una periostitis que me resultó a última hora, pero nada iba impedir que ese día yo me convirtiera en maratonista. Mi próximo reto es regresar al maratón LALA y terminar con un mejor tiempo. Lo que me motiva a seguir corriendo es el hecho de que, a partir de que lo hago, mi salud ha dado un giro de 180°, pasando de ser paciente de reumatología y cardiología, a ser una corredora que en unos meses correrá su segundo maratón.
Maria del Carmen Alonso Nava
Tengo 53 años, soy Profesora de Educación Física, y comencé a entrenar en forma a los 51 años de edad. Después de mi primer carrera de 10k, seguí entrenando y cada vez me sentía más fuerte, así que continué con carreras más largas: 15k, 21k, 30k, hasta llegar al maratón de CDMX el año pasado. Fue un reto muy importante para mí, no me fue muy bien, y es por eso que decidí seguir entrenando. Gracias a esto, empecé a superar mis tiempos, logrando varios pódiums el año pasado. Mi mayor motivación ha sido superar mis propios límites y darme cuenta de lo que soy capaz. Mi próximo reto es seguir corriendo este 2018, prepararme para volver a correr el maratón CDMX mejorando mi participación y me gustaría correr el maratón de París en el 2019. Ha sido muy importante contar con el apoyo de mi familia, de mis amigas y amigos corredores, de mi entrenador Adrián Gutiérrez y del equipo Azcapo Runners Sector 7. Me siento muy agradecida con Dios y con la vida. Correr me hace sentir feliz y viva.
Soy Guadalupe María Lozano Gaspar, de Mexicali, Baja California y tengo 58 años. Durante muchos años tuve la creencia de que, por mi edad ya no podría correr, pero cuando yo tenía 53 años, mi hermano corredor, me invitó a una carrera de 5k, y mi mayor sorpresa fue ver que ¡lo logré! A partir de eso decidí iniciar un entrenamiento en forma disciplinada con un entrenador, que me guiara de una manera adecuada. Me preparé con mucho esfuerzo y logré participar en carreras de 10k, 21k y 42k. Obtuve el primer lugar absoluto en el Ultra Maratón de Laguna Salada de 67k y participé en el Ultra Maratón de los Cañones de la Sierra Tarahumara en Chihuahua (63k), obteniendo el primer lugar en mi categoría. Esto me animó a prepararme para participar en Ultra Trail de Mont Blanc de 101 km en Francia. Para calificar, corrí el Sky Race de 50k en Flagstaf y UTMX en Huasca de Ocampo, Hidalgo, logrando 100 kilómetros, mi mayor distancia recorrida. Desafortunadamente, durante mi participación en Mont Blanc, tuve una fractura en el menisco izquierdo, lo que me hizo caminar a partir del kilómetro 67. De cualquier modo, el camino recorrido fue una experiencia única e inolvidable con unos paisajes de impresionante belleza, que no cambio por nada. Estoy a un mes de mi artroscopia, y tras mi recuperación, volveré a correr para seguir conquistando nuevos retos.
Por Rosario Ramírez Gutiérrez
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