4 estrategias para volver más fuertes después de una lesión
La resiliencia es un recurso mental que nos sirve para volver más fuertes después de una lesión y por ello, te dejamos 4 estrategias para que lo logres.
Pero antes tienes que saber que para recuperarte más rápido de una lesión, los estudios han demostrado que el estado mental juega un rol muy importante, y factores psicológicos como la disposición mental y el autocontrol pueden hacer que quien vive una lesión se sienta motivada y confiada en que mejorar su desempeño una vez que supere esta etapa.
De hecho, hay investigaciones que demuestran que el estrés afecta la circulación hacia la zona dañada y cuando tienes una lesión, lo que más necesitas es el flujo sanguíneo para la recuperación adecuada.
Otro estudio hecho por la Universidad de Utah a 278 corredores lesionados y sin lesiones, descubrieron que aquellos que normalmente se boicoteaban pensando que no eran lo suficientemente fuertes, tenían más probabilidades de sufrir alguna lesión al año siguiente.
Por ello, te dejamos estos 4 tips para volver más fuerte:
- Visualízate. Quizá te sientas nerviosa cuando quieras volver a tu entrenamiento habitual, ya que perdiste condición física durante este periodo. Es por eso, que todos los días debes hacer ejercicios de visualización como armar un Vision Board, un diario de agradecimiento y aprendizajes, meditaciones antes de dormir, conversaciones contigo misma frente al espejo, pero recuerda, tu diálogo debe ser como el que tendrías con tu mejor amiga o amigo.
- Escribe. Si experimentas angustia, escribe lo que te molesta, anota cada emoción negativa e intenta terminar con una frase positiva como “esto también pasará”, “nada dura para siempre”.
- Inspírate en los líderes. Busca historias de recuperación que te motiven para aumentar tu confianza y sentirte con mayor control y más conectada a tus propósitos. Toma sus tips para curar la lesión, analízalos y si te sirven, trata de aplicarlos a tu vida.
- Recuerda la razón por la que quieres volver. Investigaciones demuestran que los y las deportistas que se lesionan pero que tienen motivación propia, regresan a correr por simple amor, por gusto, no por demostrar o por recompensas externas y por lo tanto, experimentan menos ansiedad durante su recuperación.
Así que cambia el diálogo y la actitud, eso te ayudará a acelerar tu recuperación. Cuéntanos cómo te fue.