Consejos para evitar y curar la periostitis en corredoras
La periostitis es un dolor en la parte inferior y frontal de la pierna, justo entre la rodilla y el tobillo. Esta molestia proviene del periosto, una membrana que cubre a los huesos y que cuando se inflama, minimiza el riego sanguíneo y las señales nerviosas que están cerca del hueso.
Muchas corredoras le describen como una quemazón, sobre todo, en el último tercio de la pierna, es decir, en la parte que está por encima del tobillo. Al correr aumenta la sensación e incluso, al dormir.
¿Qué hago para evitarla?
Es una lesión muy común en corredoras y corredores novatos, es una señal de que se ha hecho mucho entrenamiento demasiado rápido y si a eso, le agregamos factores como tener pie con arco pronunciado, pie plano, usar calzado que no es para tu tipo de pisada, la falta de calentamiento y estiramiento al entrenar, poca fuerza muscular y elasticidad, además de correr de forma constante en asfalto y concreto, el riesgo de padecerla aumenta.
¿Qué hago para solucionarla?
Regla del 10%. En la primera etapa sientes las primeras punzadas, por eso, es mejor dejar de correr, a los pocos días se verá la disminución del dolor. Recuerda no aumentar más del 10% de kilometraje por semana.
Descansa. Aplicar hielo y un antiinflamatorio pueden aliviar el dolor en los primeros días. Ve con el fisioterapeuta para que pueda ponerte una cinta kinesiológica y darte el tratamiento adecuado.
Calzado correcto. Esto es un básico, ¡elige los que son para tu tipo de pisada! No es un gasto, es una inversión y cuidado hacia a ti. Checa si eres pronadora (pisada ligeramente hacia adentro o pie un poco plano), supinadora (si desgastas el calzado de los lados) y neutral.
Cross-training. Ya lo hemos dicho muchas veces, pero tenemos que recordarlo: una buena corredora no solo corre, también hace otras disciplinas. Natación, ciclismo, yoga, pilates, baile, ¡lo que quieras! pero hazlo una vez por semana y notarás la diferencia, además de descansar los músculos que siempre utilizas en la carrera, vas a trabajar otros que te harán mejorar como corredora.
Toma decisiones. Tienes que dejar de correr cuando te “arde” la parte baja de las piernas todo el tiempo, en especial, si saltas y si te duele al caminar, es probable que ya tengas una fractura por estrés. Baja tu ritmo, deja de hacer pista o descansa un poco más si te duele solo al correr pero no así al saltar o al caminar. Y solo corre si se quita el dolor con hielo y pomadas analgésicas.
Lo más importante es la prevención y sobre todo, que pongas atención a tu cuerpo cuando presenta los primeros síntomas, escúchalo, también eso es parte del entrenamiento.